jueves, 12 de enero de 2017

Censura.



    La mera posibilidad que tiene cualquiera de exponer libremente sus ideas y forma de pensar en la red hace tiempo que ha dejado de ser un logro para ser útil a diferentes intereses. En todo caso la censura campa por sus respetos incluso en espacios de supuesta libertad para la circulación de ideas.
 Sancionar a un twittero por hacer chistes por el atentado de Carrero Blanco hacen de la justicia española un instrumento de censura mientras que, sin ningún tipo de tapujo moral, niega la justicia universal y se encuentra pervertido por movimientos ideológicos de la mas diferente índole.

El comienzo.


Bueno, me han dicho que esto de escribir un blog es muy entretenido y mientras tenga la posibilidad de hacerlo gratis, me dedicare prolija mente a escribir todo lo que se me ocurra.

 Desconozco si esto tiene la menor relevancia para alguien aparte de mi pero en una sociedad tan individualista a la que nos vemos abocados, nunca estará de más para las generaciones venideras, sí como imagino se dedicaran a pasar la mayor parte del tiempo en estas páginas, adquiriendo sabiduría por supuesto. De momento nada que añadir, es posible que escriba mucho o que este sea el último post.

 Dicho esto, búsquese una vida propia, de aquí poco o nada se va a sacar.